Revista científica
de la Sociedad Española de Medicina Estética
Revista científica de la Sociedad Española de Medicina Estética

Resultados de la mesoterapia homeopática en el tratamiento de adiposidades localizadas

Homeopathic mesotherapy results
in treating localized adiposities

Autores

Introducción

La mesoterapia se basa en la infiltración de pequeñas cantidades en o muy cerca de una zona afectada para tratamientos de tipo médico y/o cosméticos1,2. Si bien la procaína y antiinflamatorios no esteroideos fueron los primeros fármacos utilizados en traumatología con esta técnica, hoy en día existe dentro del campo de la medicina estética un amplio catálogo de medicamentos frecuentemente aplicados en forma de cócteles tales como extracto de lecitina (fosfatidilcolina), silicio orgánico, L‑carnitina, desoxicolato sódico, aminofilina, teofilina, metilxantinas, cafeína, hialuronidasa, colagenasa, ácido glicólico, ácido retinoico, vitaminas (A, C, D, E, K) o elementos traza como el zinc, el cobre, el selenio, el cromo, el manganeso, la acetilcolina o el dimetilaminoetanol (DMAE)3‑6.

Actualmente, España cuenta con medicamentos homeopáticos aprobados por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios para su uso en mesoterapia y regulados por el Real Decreto 2208/1994, aunque existe muy escasa bibliografía científica acerca de la aplicación de esta técnica con dichos fármacos. En todo caso son de uso cada vez más frecuente en las clínicas que practican la medicina estética en España.

Tras una búsqueda documental en PubMed de los artículos de los últimos 10 años que incluyesen las palabras clave: mesh, mesoterapia, homeopatía, paniculitis, grasa subcutánea y/o celulitis, se encontraron 32 publicaciones de referencia. De estas, 24 se consideraron relevantes por tratar de mesoterapia corporal con fines estéticos o cosméticos, descartando las que aplicaban esta técnica en el tratamiento de patologías como el mixedema; uso en neuroinmonología; experimentos con animales o que describiesen técnicas de aplicación más profunda (subcutánea) que no se corresponden con la técnica de la mesoterapia como tal, que detallaremos más adelante. Paralelamente una búsqueda general arrojó otros 15 artículos.

En cuanto a las posibles complicaciones de esta técnica se ha descrito en la literatura científica reacciones alérgicas, atrofia y lipodistrofia, hiperpigmentación postinflamatoria, nódulos e irregularidades, urticaria localizada, granuloma anular, paniculitis granulomatosa no infecciosa, reacciones vasovagales, lipotimias1,4,5, infecciones por micobacterias atípicas7‑11, edema transitorio, náuseas, vómito, hiperestesia de la piel, intoxicación al fármaco inyectado (cafeína)12 y en algunos casos se ha descrito necrosis de la piel13,14.

Respecto a una de las complicaciones más preocupantes, la infección por micobacterias atípicas, se encontraron referencias en sólo 2 artículos sobre productos homeopáticos7,9, uno de los cuales se trata de una serie de casos en los que se utilizó un medicamento contaminado por Paenibacillus provencensis, que fue retirado del mercado tras la intervención de las autoridades sanitarias. El segundo artículo trataba de un caso puntual en una mujer de 39 años. En diferentes artículos se menciona el daño de la barrera protectora de la piel con las múltiples punciones, constituyéndose cada una de ellas en una posible puerta de entrada de microorganismos10,11.

Por otra parte, se denuncia en varios países la utilización de medicamentos no aptos para su uso como inyectables sin ningún tipo de control sanitario, sumados a la práctica de la mesoterapia corporal por personal no médico y sin atender a las precauciones universales1,2,8,9. Otro factor que se menciona es la infección en piscinas o en el contacto con acuarios o con suelos (trabajos de jardinería), donde se han aislado con frecuencia micobacterias de diferentes especies9,10.

Por todo lo recogido consideramos interesante realizar este estudio para analizar el resultado del tratamiento con mesoterapia homeopática y los factores predictores de respuesta al mismo, en un grupo de pacientes que acudieron a nuestra consulta durante los meses de enero a marzo de 2012.

Material y método

Criterios de inclusión

Edad entre 18 y 65 años. Celulitis o adiposidades localizadas en brazos, abdomen, flancos, glúteos y/o muslos; aceptación en participar en el estudio, autorización para la realización y publicación de fotografías con fines científicos.

Criterios de exclusión

Encontrarse realizando tratamiento dietético o ingiriendo medicación para la pérdida de peso; embarazo o lactancia; infección local o sistémica; intervenciones quirúrgicas previas del área a tratar durante los últimos 3 meses; trastorno mental o incapacidad para comprender el protocolo o el consentimiento informado; alteración de la coagulación; colagenopatías; obesidad (IMC superior a 30); diabetes tipo I; linfedema; antecedentes de TVP; úlceras venosas; alteraciones tróficas o flebitis de MMII; otras enfermedades concomitantes: insuficiencia renal, insuficiencia cardiaca, hepatopatías, enfermedad de Graves Basedow, SIDA, alergias medicamentosas múltiples, fobia a las agujas y/o alteraciones conocidas de la cicatrización.

Muestra

De 39 candidatos se descartaron dos por obesidad y dos abandonaron el tratamiento antes de la tercera sesión por problemas personales que impedían el cumplimiento del calendario de sesiones. Fue incluida una paciente con esclerosis múltiple previa autorización de su médico. La media de edad fue de 40±20 años. Todos los pacientes realizaron entre 8 y 10 sesiones de mesoterapia. El 57% de la muestra practicaba ejercicio regularmente. En cuanto al peso, el 77% de la muestra presentaba normopeso (IMC=18,5‑24,9), 17% sobrepeso grado I (IMC=25‑26,9) y el 17% sobrepeso grado II (IMC=27‑29,9), con un IMC medio de 23,5±1,23. Conforme a la tabla de clasificación suministrada por el fabricante del analizador de composición corporal OMRON, presentaron un porcentaje de grasa normal 16 individuos de la muestra (45,7%), 14 de ellos un porcentaje alto (40%) y sólo 5 correspondieron a porcentaje muy alto (14,3%). Sólo un paciente de la muestra presentó un índice de grasa visceral anormal.

A todos los sujetos se les realizó una historia clínica completa y se les pasó una encuesta pretratamiento acerca de sus antecedentes médicos incluyendo consumo de alcohol, práctica de ejercicio y hábitos nutricionales. Ante cualquier enfermedad susceptible de duda, se solicitó informe a su médico autorizando este tipo de tratamiento.

Tras la preselección, se llevó a cabo el estudio de composición corporal que incluyó: bioimpedancia, antropometría y fotografías corporales. Para efectuar la bioimpedancia, se utilizó un monitor de composición corporal OMRON, modelo HBF‑511B‑E / HBF‑511T‑E. La antropometría incluyó el registro de peso (kg), talla (cm), IMC, circunferencia de cintura y cadera y, según correspondiera, al tratamiento el perímetro de brazos y/o muslos.

Con el objetivo de que los perímetros de brazo y muslo fueran proporcionales en tamaño respecto a la estatura del paciente, utilizamos una regla por cada sujeto de estudio, con la medida correspondiente a la falange media del tercer dedo que en acupuntura china se conoce como cun. Los perímetros se midieron a distancias de 2 cunes entre sí.

A partir de las tablas referenciadas por el manual del monitor corporal de bioimpedancia, se calificaron los porcentajes de grasa corporal, músculo y el nivel de grasa visceral. Según informa el fabricante estas tablas se basan en estudios científicos anglosajones7,15.

En relación con los protocolos de aplicación de la mesoterapia, si bien en Europa, algunos autores mencionan su ausencia, se pueden encontrar algunas propuestas de sociedades estadounidenses, francesas o de los propios laboratorios productores de los medicamentos homeopáticos16. En este estudio se ha utilizado el protocolo recomendado por el laboratorio fabricante del medicamento.

Tratamiento

Previo consentimiento informado, se aplicó una sesión de mesoterapia semanal hasta un total de entre 8 y 10, utilizando cócteles de medicamentos homeopáticos con la composición que se indica en la en la siguiente lista:

  1. Glándula suprarenalis (suis) D12, Glándula thymi (suis) D12, Hypophysis (suis) D12, Ovarium (suis) D12, Páncreas (suis) D12 y Thyreoidinum (suis) D12.
  2. Aesculus D30, Belladona D12, Calcium fluoratum D30, Carduus marianus D12, Hamamelis D6, Mezereum D12, Placenta (suis) D30, Pulsatilla D30, Secale cornutum D30 y Vipera berus D12.
  3. Carduus marianus D12, Chelidonium D4, China D4, Cholesterium D6, Colocynthis D6, Lycopodium D6 y Nux vomica D4.
  4. Acidum nitricum D6, Berberis vulgaris D3, Lycopodium D6 y Sarsaparilla D4.
  5. Alumina D12, Bryonia D4, Colocynthis D4, Lachesis D30, Lycopodium D6, Mercurius sublimatus corrosivus D8, Nux vómica D6, Plumbum aceticum D12 y Sulfur D12.
  6. Arnica D4, Belladona D4, Caléndula D3, Echinacea angustifolia D4, Hamamelis D4, Rhus toxicodendron D6 y Ruta D6.

Estos medicamentos también tienen indicaciones sistémicas como estimulantes de la función glandular femenina, del sistema linfático y circulatorio, medicación de apoyo en manifestaciones orgánicas y funcionales del hígado y la vesícula biliar, tratamiento de cálculos renales, distensión abdominal y estimulantes de la regeneración tisular.

Según localización de grasa y/o celulitis, se usaron 5 protocolos: abdomen femenino (n=10), abdomen masculino (n=11), glúteos, abdomen femenino + glúteos (n=9) y brazos (n=1).

Las regiones anatómicas objetivo fueron tratadas con la técnica “punto por punto” infiltrando el cóctel de medicamentos en la zona a tratar, con una aguja intradérmica de 30G x 4 mm perpendicular a la piel. En el caso de pacientes con cicatrices abdominales (n=3) también se infiltró la zona correspondiente a dichas cicatrices.

A todos los individuos se les realizó biopuntura, también conocida como homeosiniatría, que consiste en aplicar los medicamentos en puntos de acupuntura china. En este caso en los miembros inferiores en los puntos 6 riñón, 3 riñón, 6 bazo-páncreas, 9 bazo-páncreas, 8 hígado y 10 bazo-páncreas.

Una vez finalizado el tratamiento, siempre antes de la 10ª sesión, se realizaron fotografías corporales y nueva antropometría.

Resultados

Eficacia del tratamiento

Se consideró como respuesta al tratamiento el cumplimiento de 2 o más de los siguientes parámetros:

  1. Pérdida de IMC.
  2. Disminución del porcentaje de grasa corporal de 1 punto o mayor.
  3. Disminución de perímetro de cintura y/o muslos.
Tabla I
Tabla I. Resultado del tratamiento. *Excluye pacientes con protocolo glúteos y protocolo brazos. **Sólo protocolo glúteos y abdomen glúteos. Los demás items incluyen toda la población.

Para determinar la respuesta al tratamiento se utilizó una t‑Student para contraste de medias en muestras relacionadas para identificar factores predictores de respuesta al tratamiento un análisis por regresión logística univariante con SPSS‑15. La significación estadística se fijó en p<0,05 (Tabla I).

  • El IMC no presentó variaciones estadísticamente significativas.
  • El porcentaje de grasa corporal disminuyó en 20 individuos. La reducción media fue del 1% (p<0,05).
  • El porcentaje de músculo fue más elevado en 22 individuos, igual en 10 y disminuyó en 3.
  • Se obtuvo una disminución del perímetro de cintura en 27 pacientes (77%), en 5 permaneció igual (14%) y 3 presentaron un incremento (9%). Excluyendo a los pacientes a los que se trató la zona de brazos y a los que se trató únicamente la zona de glúteos, la media de disminución de este perímetro fue de 1,7 cm de pérdida (p<0,001), con extremos de 5 de pérdida y 2 de incremento.
  • Un total de 23 individuos presentaron disminución del perímetro de cadera (66%), 7 se mantuvieron igual (20%) y 5 presentaron un incremento (14%). La media de centímetros pérdida fue de 1,2 (p=0,001), con extremos de 5,5 cm de pérdida a 2 cm de ganancia.
  • De 20 individuos a los que se trató con el protocolo de glúteos, 18 presentaron una disminución del perímetro de muslos, uno lo mantuvo igual y otro presentó un incremento de este. La media de pérdida de circunferencia de muslos fue de 1,56 cm (p<0,001), con extremos de 5 de pérdida a 1 de ganancia.
  • En cuanto a los brazos, el protocolo 5 sólo se aplicó a un individuo que presentó una disminución en su circunferencia de 1 cm, considerada como no significativa (p=0,9).
  • Los factores predictores de respuesta al tratamiento edad, IMC, práctica de ejercicio y porcentaje de grasa corporal previa no fueron significativos.
  • Respecto a la respuesta al tratamiento según protocolos, hemos visto que existe una tendencia a obtener reducciones mayores con el protocolo 3 que, sin embargo, no alcanza la significación estadística probablemente porque la muestra es pequeña (Tabla II).
Tabla II
Tabla II. Respuesta al tratamiento según protocolo (significación p=0,05). A = Protocolo Abdomen; AG = Protocolo Abdomen-Glúteos; G = Protocolo Glúteos.

Valoración de la satisfacción

La valoración del grado de satisfacción con el tratamiento se hizo con una escala de Likert de 4 puntos (Muy insatisfecho, Insatisfecho, Satisfecho y Muy satisfecho). 26 individuos (74%) se mostraron satisfechos con el resultado, 8 muy satisfechos (23%) y sólo 1 se mostró insatisfecho (3%).

Discusión

La mesoterapia se considera útil para disminuir los depósitos de grasa corporal y la apariencia física en general, actuando en cada una de las tres unidades de la dermis: circulatoria, neurovegetativa e inmunológica1‑4. En el caso de la mesoterapia homeopática, hay escasa bibliografía al respecto y mucho más si hablamos de su mecanismo de acción. Se podría postular por una parte la acción mecánica de la aguja, con la consiguiente respuesta antinflamatoria y neovascularización del tejido que acompaña a la respuesta reparadora local del tejido tratado. También se podría inferir de las indicaciones de los fármacos ya comentados, el efecto drenante de estos medicamentos, la mejora de la circulación locorregional y lipólisis asociada a todo lo que comentamos.

El 60% de los individuos de nuestro estudio han presentado pérdida de grasa corporal sin mayor variación del peso corporal (p<0,05). Si bien, también se observó una ganancia de músculo, la consideramos parte de la proporción matemática que realiza el monitor de composición corporal de grasa referente a músculo y no una ganancia de músculo como tal. En cuanto a la grasa visceral, era normal al inicio y final del estudio en casi todos los sujetos; esto nos reafirma que el tratamiento actúa a nivel local y no sistémico. Respecto a la antropometría, a la hora de valorar la respuesta al tratamiento hemos considerado mucho más fiable el perímetro de cintura que el de cadera, ya que técnicamente observamos más limitaciones en cuanto a la posibilidad de variación del perímetro de cadera tomado en el mismo individuo y con el mismo observador, que pensamos podrían afectar la validez de dicha medición, sin embargo se observó una disminución significativa en este perímetro posterior al tratamiento similar a la presentada en el perímetro de cintura (1,56 cm; p>0,001); el tratamiento de la zona glúteos en todo caso se evaluó con la medida del perímetro de muslos. En el caso de la única paciente que tratamos con el protocolo de brazos, llama la atención que pese a haber presentado una ganancia ponderal durante el periodo de tratamiento, la circunferencia de los brazos disminuyó tras la aplicación de este.

Desconocemos los instrumentos de medida de los artículos científicos referenciados, pero frecuentemente los aparatos de bioimpedancia presentan como limitación su baja fiabilidad al no detectar cambios inferiores al 10%, que no es el caso del nuestro, con lo que la pérdida de grasa informada es fiable (a partir del 3,5% en nuestro monitor).

También desconocemos hasta qué punto pueda afectar la extrapolación del estudio el hecho de que las tablas de referencia con las que se califica el nivel de grasa corporal de nuestro monitor de bioimpedancia se basan en estudios con muestras norteamericanas que hemos aplicado a población hispanoamericana y europea directamente.

En 2011 Sarkar et al, consideraron de nivel C (beneficio pequeño), los resultados obtenidos en el caso de pérdida de peso o “moldeado corporal” y en el tratamiento de depósitos de grasa localizada; lo consideran de nivel D (prácticamente nulo), en el tratamiento de la celulitis1. Contrario a esto, en nuestra experiencia hemos encontrado que en los pacientes tratados con mesoterapia homeopática no se ha producido mayor variación en el peso corporal, pero sí que se ha producido una mejora de la celulitis, que no se encuentra documentada fotográficamente al nivel que desearíamos, ya que se requiere un alto nivel de tecnología para obtener unas imágenes de calidad; si bien contamos con algunas imágenes en las que se observa una mejora del aspecto de la piel de naranja importante (Figura 1).

Figura 1
Figura 1. Cambios en aspecto de celulitis antes y después del tratamiento.

Tampoco se han encontrado referencias en los trabajos revisados respecto al tratamiento de cicatrices. No obstante, las pacientes de nuestro estudio que fueron infiltradas en dichas cicatrices presentaron una mejoría en la elasticidad de la piel, que se encontraba mucho menos retraída y pigmentada al final del tratamiento (Figura 2).

Figura 2
Figura 2. Cambios en aspecto de cicatriz antes y después del tratamiento.

No hemos podido responder a la pregunta clásica de si la mesoterapia tiene otros efectos sistémicos. Algunas pacientes encontraron una mejora subjetiva de la textura de la piel y una menor caída del pelo. Otros hallazgos que llamaron nuestra atención fueron la mejoría ecográfica de dos pacientes con síndrome de ovario poliquístico y colelitiasis respectivamente, que se encontraban con seguimiento regular durante los últimos 3 y 5 años. En ambos casos se presentó una mejora tras las 10 sesiones de tratamiento con resolución ecográfica de la patología. Estos hallazgos, podrían ser casuales o bien estar ligados al efecto de los medicamentos homeopáticos a nivel de vesícula biliar y ovario, pero habría que realizar trabajos de investigación con diseño adecuado de casos y controles para determinar dicho efecto.

En nuestro estudio la participación de un 11% de varones, puede considerarse un reflejo del comportamiento social actual, en el que cada vez más hombres demandan tratamientos de medicina estética. Por otra parte, desde el punto de vista estadístico, se trata de una muestra de población masculina muy reducida para extrapolar datos.

Respecto a las complicaciones mencionadas, en nuestra muestra de pacientes un individuo varón presentó un síncope vasovagal, coincidente con una gastroenteritis y 3 mujeres presentaron mareos en sesiones puntuales, de intensidad leve y sin mayor trascendencia. En cuanto a las infecciones, suelen ser de aparición tardía debido al tiempo de incubación de las micobacterias, pudiendo ser de hasta 3 meses postratamiento, no habiéndose registrado ninguna incidencia al respecto.

En cuanto a los factores predictores de respuesta al tratamiento pensamos que la ausencia de asociación significativa entre los resultados y los factores estratificados, puede deberse a la dispersión de la muestra en varias cohortes por protocolos, por lo cual se requiere realizar estudios con poblaciones de mayor tamaño y utilizando el mismo protocolo para establecer dicha asociación.

Valorando la respuesta al tratamiento por protocolos podemos afirmar que existe una tendencia a obtener reducciones mayores de perímetro de muslos, porcentaje de grasa corporal y en menor grado de perímetro de cintura, con el protocolo 3 que sin embargo no alcanza la significación estadística, probablemente por el tamaño reducido de la muestra.

Conclusiones

Las mujeres del estudio presentaron una disminución significativa de los niveles de grasa corporal, perímetro de cintura y/o muslos, además de una mejora del aspecto de la celulitis y adiposidades localizadas, sin variaciones en el peso corporal.

En nuestra experiencia, la mesoterapia homeopática resultó ser un procedimiento seguro con un índice de satisfacción elevado.

Se requiere realizar nuevas investigaciones con un mayor número de participantes, especialmente de varones, una selección aleatorizada y estratificada por tratamiento, y unos protocolos de tratamiento estandarizados.

Fuentes de financiación y conflicto de intereses

No se ha percibido ningún beneficio o ayuda económica para el desarrollo de la investigación y tampoco existen intereses financieros relevantes a este manuscrito ni limitaciones morales o aspectos de tipo académico que consideremos dignos de mención.

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